Por Miguel Villaseñor

Publicado en la Web RFEA el 23.12.2021

 Continuamos con el serial dedicado a aquellos recintos, estadios y pistas que hicieron historia en el atletismo español y que han desaparecido. En este tercer capítulo hablaremos del estadio de Balaídos de Vigo, de la pista de San Ignacio de Bilbao y del estadio del Reus Deportivo en Reus.

Balaídos (Vigo)
​ En el año 1928 se inaugura en Vigo el estadio de fútbol de Balaídos, al suroeste del centro de la ciudad, junto al río Lagares. Contrariamente a lo que muchos creen, Balaídos estuvo vinculado desde un principio con el atletismo, disputándose allí competiciones atléticas desde 1929, en la pista de jabre (arena de granito molido), de la cual desconozco la medida, como los «match Vigo-Oporto» y como salida y llegada de campeonatos de campo a través, el más importante el de España de 1930, pues aquellos parajes en aquel entonces estaban despoblados.

En agosto de 1944 se produce la inauguración de la nueva pista, una pista envidiable de ceniza de 400 metros de cuerda y seis calles, con la celebración de los Campeonatos del Frente de Juventudes, el campeonato sub18 de la época, y con gran asistencia de público. En aquellos años fue habitual la inauguración de recintos con la celebración de estos campeonatos. Aquel tuvo una anécdota curiosa. El último día, el 27 de agosto, acudió Francisco Franco, el Jefe del Estado. Alguien pensó que, para agradar al Generalísimo y para una mejor visión desde el palco presidencial, situado a mitad de la grada principal, las llegadas de las pruebas se realizaran a mitad de recta y no al final de la misma. Y así se hizo. Obsérvese en la fotografía adjunta la salida de la prueba de 800 metros.

Propiedad del Real Club Celta de Vigo desde 1945, la pista queda inutilizable en los siguientes años y es reinaugurada en la primavera de 1950. Curiosamente, tras ese campeonato del Frente de Juventudes no se volvió a disputar ningún campeonato de España de cualquier categoría, excepción hecha del de cross de 1958, cuya salida y llegada se situó en la pista. En Balaídos se batieron 18 récords de España, seis masculinos y doce femeninos, entre 1961 y 1969, además del de 110 metros vallas en 1929 en un Galicia-Oporto. El final de los años 50 y los primeros años de los 60 son el momento álgido de aquella pista, con la tradicional celebración del Gran Premio Ciudad de Vigo y del Memorial Juan José López. En estas dos reuniones se batieron la mayoría de los records de España nombrados, con los vigueses Javier Álvarez Salgado y Luisa María García Pena como grandes protagonistas.

Pero a finales de los años 60 la pista del estadio de Balaídos agoniza con rapidez, con las reformas de las gradas del estadio de 1967 y 1969. Una de las últimas competiciones en el estadio es el Campeonato Gallego Absoluto del 28 de septiembre de 1969. El fútbol, cuya convivencia nunca fue fácil, impone su ley y una simple ampliación de las medidas del terreno de juego hace que la pista pierda su homologación. Aunque se publica en 1971 que tendrán tartán, la realidad es que su estado es calamitoso. Nunca serán de tartán.

​ Desde finales de los 60 y hasta 1981 toma su relevo en Vigo una pista de dimensiones reducidas, la del IMD, Instituto Municipal de Deportes, que fue la sede del atletismo vigués durante casi 15 años. De ceniza y seis calles, a pesar de sus 300 metros de cuerda los atletas se decantan por ella, pues es siempre mucho más asequible que Balaídos y está en muchas mejores condiciones; por ejemplo, el gran Javier Álvarez Salgado efectúa su preparación para los Juegos de México 1968 en el IMD. Mientras tanto, en Balaídos la remodelación de la grada del estadio hace que quede destrozada la pista (sobre todo recta de llegada y una curva). No obstante, en los primeros años 70 algunos entrenaban aún allí. Con todo, en 1973 se celebró un 100 en la recta contraria. Es la última competición allí disputada. El golpe de gracia de la pista será en 1977, con la construcción de fosos al comienzo de las gradas, y la pista desaparece como tal, quedando únicamente parte del espacio que ocupaba por la misma. El dibujo de las curvas de la antigua pista, con las gradas de los fondos en forma de arco, se ha mantenido hasta hace bien poco tiempo, en el que se están acometiendo la reforma de las mismas.

Habría que esperar al año 1981 para que se inauguraran las pistas de material sintético anexas al estadio, ya de 400 metros de cuerda, y que es la sede de atletismo vigués desde hace 40 años. El 29 de agosto de aquel año 1981 se disputó la primera competición, el 5 de septiembre se celebró el Gran Premio Ciudad de Vigo, con atletas extranjeros. Aunque muchos siguieron entrenando durante un buen tiempo en la pista del IMD, pues las instalaciones de la nueva pista de Balaídos tardaron en ponerse en marcha.
(Con la colaboración de Emilio Navaza, Óscar Fernández, Antonio Cordero y Javier Álvarez Salgado)





San Ignacio (Bilbao)
​ La pista de San Ignacio, en Bilbao, fue la sede del atletismo vizcaíno durante más de una década. Lo primero que llamaba la atención era su ubicación, en medio del barrio del mismo nombre, al noroeste del centro de la capital bilbaína, rodeado de edificios de viviendas. El barrio de San Ignacio se comenzó a construir sobre la vega de Deusto, en la margen derecha de la ría, a mediados de los años cuarenta y su desarrollo abarcó los años cincuenta y principios de los 60. Un barrio peculiar de manzanas abiertas, edificios iguales unos a otros y con un amplio espacio ocupado por una zona deportiva, concluida en 1962, con pista de atletismo.

San Ignacio, con su ceniza negra y seis calles en su anillo, curiosamente no tenía la medida estándar de 400 metros, sino la caprichosa cuerda de 391 metros. Y tenía una característica e inconfundible barandilla rodeándola. Era una muy buena pista, acogedora y muy apreciada por los atletas. En ella se conseguían buenas marcas. La primera competición se produjo antes de la inauguración oficial, en octubre de 1962, con la presencia de atletas argentinos, mujeres incluidas, que habían estado en los Juegos Iberoamericanos de Madrid unos días antes. El momento álgido de la pista de San Ignacio fue todo un encuentro internacional España-Francia masculino, celebrado los días 18 y 19 de julio de 1964, al que nuestros vecinos acudieron con sus mejores hombres. Perdimos, pero por poco, 110 a 101 puntos y los españoles obtuvieron tres records de España y con triunfos, entre otros, de Mariano Haro, Pipe Areta y Luis María Garriga. El único vizcaíno de aquel equipo fue Ignacio Sola.

En San Ignacio se batieron cinco records de España, todos en 1964, tres en aquel España-Francia, otro en el llamado Gran Premio de Vizcaya y otro más en el campeonato nacional júnior allí disputado. A reseñar que en agosto de 1969 también se disputó un España-Irlanda júnior masculino, que ganamos con comodidad por 119 a 82. También se disputó el campeonato de España de decatlón en 1963 y el nacional júnior referido de 1964. Por cierto que el arranque de San Ignacio coincidió en el tiempo que la reinstauración del atletismo femenino en España, por lo que en aquella pista entrenaron las pioneras vizcaínas de los años 60, lideradas por atletas como Inmaculada Celaya o Josefina Ruiz.

En la pista de San Ignacio tenía su final en aquellos años 60 la popular carrera de Las Arenas-Bilbao, disputada en diciembre o enero, que entonces tenía 7,2 km y que salía desde el Puente Colgante y subía la ría por la margen derecha para terminar en San Ignacio. Era una carrera muy seguida por los aficionados y en ella compitieron en aquel tiempo las figuras españolas del momento, como Mariano Haro o Fernando Aguilar.

San Ignacio tuvo una actividad atlética intensa entre 1963 y 1971, y convivió en el gran Bilbao con la pista de San Vicente, en Barakaldo. Pero en 1972 se inaugura la pista de Fadura, en la cercana Getxo, que fue en principio también de ceniza pero con ocho calles. A partir de ese momento el centro de gravedad competitivo del atletismo vizcaíno se desplazó a Fadura. Sin embargo, San Ignacio siguió siendo lugar de entrenamiento de los grupos que dirigían Alberto Díez y Eliseo Martínez Pallás, con atletas como Luis Sarría, Gerardo Calleja, Ramón Ávila, Prudencio Uriondo, Javier Sobera, los hermanos Frechilla, Txema Ruiz de Gopegui, Bonifacio Maestro, José Antonio García Feijoo, Miren Mendoza… Todos ellos se forjaron en las seis calles de ceniza de la pista de San Ignacio.

La pista de San Ignacio siguió existiendo muchos años más, para desaparecer definitivamente a comienzos de este siglo. Hoy día, entre las calles Universidad de Oñate, Orixe, Etxepare y Arturo Campión se encuentra el completo Polideportivo de San Ignacio, con piscinas, campos de fútbol, frontón y pistas polideportivas pero, desgraciadamente, ya sin pista de atletismo. (Con la colaboración especial de Javier Landeta y Aitor Markina Celaya)

Reus Deportivo (Reus)
​ El campeonato de España de 1928, la 11ª edición, se disputó en una pista de nuevo cuño, una pista de 400 metros de cuerda situada en la ciudad tarraconense de Reus, y propiedad del club Reus Deportivo, la primera de ceniza de Cataluña. Aquellos campeonatos se encomendaron a Barcelona, pero en la capital catalana no había una instalación adecuada, pues Montjuïc no estaría listo hasta el año siguiente. Con toda prisa se preparó la pista de Reus, con una organización excelente y numeroso público, pero que adoleció de algo que ocurría con frecuencia en las pistas de nueva creación: su blandura, su falta de asentamiento, que dificultaba sobremanera la práctica atlética. El nuevo estadio, con una característica y frágil visera sobre la pequeña grada, sustituía en la ciudad reusense al campo de deportes del camino de Aleixar, inaugurado en 1919, que tenía un velódromo en el que se realizaban carreras de atletismo.

Durante la Guerra Civil las instalaciones del Reus Deportivo, pista incluida, sufrieron grandes desperfectos por los bombardeos. En aquellos años al estadio se le llamó «Estadi Popular», ya que durante la República al club se le denominó Reus Popular. Tras la guerra se acondiciona y es utilizado por el atletismo y por el fútbol. En 1961 se le añade una espectacular visera. Pero, además del citado campeonato de España de 1928, el estadio del Reus Deportivo no fue un recinto muy utilizado por el atletismo catalán para competiciones.

Conocida ha sido la rivalidad de los dos principales clubes deportivos de la ciudad, el Reus Deportivo y el Club Natación Reus Ploms. Ambos tenían secciones de muchos deportes, entre ellos atletismo, y en algunos casos con triunfos internacionales, como es el caso del hockey sobre patines en el caso del Reus Deportivo o de la natación en el caso del Reus Ploms. Precisamente este último disponía también desde los años 40, entre sus instalaciones deportivas, de una pista de atletismo, al principio de 300 metros de cuerda, posteriormente de 400 metros y 6 calles. Es complicado en ocasiones conocer qué competiciones disputadas en Reus se desarrollaron en cada uno de los dos estadios. La pista del Reus Ploms tuvo mucha más actividad que la del Reus Deportivo y allí se disputaron más competiciones. Esta pista del Reus Ploms hoy día sigue existiendo, con material sintético y con un anillo muy peculiar y alargado, pues las rectas miden 110 metros y las curvas 90 metros cada una y es utilizada por el atletismo reusense.

No corrió la misma suerte el estadio del Reus Deportivo, que se utiliza hasta los años 70 y desaparece en 1979, tras medio siglo de vida. En su lugar, en la calle Antoni Gaudí, se sitúan hoy las amplias instalaciones del club, como piscinas, pabellón deportivo, canchas de baloncesto, tenis… pero ya sin pista de atletismo.

Se ruega comunicar cualquier corrección o sugerencia a miguelvillasenororozco@hotmail.com

Por AEEA1987